De flor en flor

Hace unos años las flores volvieron a entrar con fuerza en la pasarela, tras una época en la que cayeron en el olvido por considerarse demasiado vintage. La vuelta de la moda vintage las ha traído con ella y se ha superado el temor a rebasar la línea de lo retro y entrar en el terreno de lo hortera.

El empujón definitivo para la recuperación de las flores en la moda, lo dieron los grandes diseñadores, como siempre. El primero que se atrevió fue Jil Sander con sus flores en tonos flúor. Los colore fuertes contrarrestaban así cualquier aire demasiado naïf que este estampado pudiera aportar. Después de él, grandes como Chanel, Valentino, Louis Vuitton o Miu Miu siguieron con la tendencia.

Pero si tu eres de las que no te atreves a llevar el estampado floral sobre tu propio cuerpo, también están los complementos. Las flores como complementos siempre han dado mucho juego. Una flor natural en el pelo aporta alegría, mientras que la misma, seca y puesta sobre la solapa de un blazer puede darnos una dosis de elegancia y distinción.

Os cuento todo esto porque me sorprende el radical cambio que ha pegado Zara en sus colecciones. Acostumbradas a colecciones simples en colores lisos ahora reaparece el barroquismo y la mezcla de texturas en la que predominan las flores. Las flores se mezclan con plumas, encaje, estampado de serpiente y con todo lo imaginable. Envidenteme no son looks discretos pero son ponibles según la ocasión.

Aquí se aprecia la variedad de tejidos, sin embargo todos tienen en común el tono de base negro y así se consigue la armonía.

Leggins totalmente ochenteros que sólo favorecen a las piernas más delgadas. Este look es original porque normalmente optamos por destacar la parte superior de los outfits. En este caso la parte superior queda neutra y la inferior cobra todo el protagonismo.

La mezcla se modera y se hace más ponible. Una combinación gandora: cuello cisne y falda lápiz.

Otro look de oficina dónde las flores son las protagonistas.

Mi preferido: a pesar de la mezcla de flores, plumas y encaje, lo que desprende este outfit es sobriedad y elegancia. El pelo recogido también ayuda.

¿Quién dijo que las flores eran un estampado veraniego?