Seguro que a nadie le ha pasado desapercibido el maravilloso vestido de Stella McCartney que lució Kate Winslet en el Festival de Venecia. Ella impresionó por su belleza y por su buena elección y es que quién sabe cómo vestirse tiene mucho terreno ganado.
A esto es a lo que vamos en este post. Este vestido (y otros de la misma diseñadora) se encuentra a la cabeza de una tendencia muy favorecedora que no podíamos dejar de comentar; se trata de las líneas de contrastes. Si aprendemos a jugar con las líneas y las sombras situándolas en lugares adecuados conseguiremos definir nuestra figura y destacar u ocultar aspectos de la misma. Cómo ejemplo en este vestido podemos apreciar que las franjas negras situadas en los laterales contribuyen a hacer una figura más alargada, es un efecto óptico que, sin duda, funciona muy bien.
Stella McCartney ha sido una de las diseñadoras que ha rescatado esta tendencia, junto a otros como Louis Vuitton, pero no podemos olvidarnos de las míticas bailarinas de Chanel que ya en su día fueron diseñadas con esta técnica para hacer que nuestros pies parecieran más alargados y estrechos.
¿Y en las tiendas?
Pues también encontramos cositas:
Esta camiseta de Mango es perfecta para chicas con hombros anchos, o aquellas que por alguna otra razón quieran disimularlos.
Estos dos pantalones de Massimo Dutti con las partes internas en un tono más oscuro hacen que nuestras piernas parezcan más delgadas.
La misma función tienen las líneas negras de este Top de Stradivarius. Las lineas laterales en cuerpo y brazos reducen nuestro contorno.
Por último este ejemplo de Zara con el juego de contrastes cambiado, mientras la parte mayoritaria es oscura, las partes externas son las claras. En este caso la efectividad de la ilusión óptica se reduce.